ACCESO: TANGE
ZONA: VALLE DEL MUSTANG
DISTANCIA: 26,5 KILÓMETROS
DURACIÓN: 8 HORAS
DESNIVEL: +1.700 MTS -2.070 MTS
PUNTO MÁS BAJO: 2.955 MTS
PUNTO MÁS ALTO: 4.273 MTS
MAPA Y TRACK DE LA RUTA (pinchar en Wikiloc para descargar el track):
GRÁFICA DE LA RUTA:
RELIVE DE LA RUTA:
MÁS INFORMACIÓN DE LA RUTA:
David y yo continuamos esta gran aventura en Nepal, donde esta será la penúltima etapa de este maravilloso treking. Hoy amanecemos en Tange y dormimos en el alojamiento con los tres australianos que están haciendo este recorrido en bici.
Cogemos fuerza con el desayuno y el pan tibetano ya que nos llevan a visando varios días de la dureza de esta etapa.
Salimos del pueblo de Tange (3.330 mts) y cruzamos el río por un puente tibetano.
Echamos la vista atrás para ver la ubicación del pueblo y la bajada que hicimos ayer.
Bordeamos una ladera entera para buscar la bajada a otro río, nos pasan los tres ciclistas que están con la bici acuestas el 90% del camino.
Tenemos que cruzar el río (3.373 mts) y subir hasta el collado que se ve arriba que esta por encima de los 4.100 mts.
Este enorme puente tiene 171 mts de longitud y una buena altura con respecto al río.
Es impresionante cruzar estos espectaculares puentes.
En el recorrido vemos varios ejemplares de mezcla de Yak con vaca domestica, que los locales utilizan para las labores agrícolas en las que necesitan más fuerza.
Vamos subiendo por sendero muy obvio poco a poco, no hay prisa y a esta altitud hay que tomárselo con calma.
Sigue con nosotros el guía al que ayer le dio el mal de altura y va sufriendo en cada subida. Nuestro guía también esta tosiendo mucho y sube tocado, nosotros vamos subiendo solos poco a poco por delante.
Llegamos al Collado Paa Pass (4.183 mts), tras una subida exigente de 900 mts de desnivel en 5 kilómetros.
Coincidimos con los australianos que se han pegado una buena soba cargando con las bicis el mismo recorrido que hemos hecho nosotros, ahora pueden rodar un poco, pero la verdad que este sendero no es ciclable, porque la bajada tampoco es para disfrutar.
Mientras esperamos al guía y porteador, decido subir a la cima que tenemos justo enfrente, las cimas cercanas de 7.000 y 8.000 son espectaculares.
Aquí tenemos el Dhaulagiri que con sus 8.167 mts, es la séptima montaña más alta del planeta.
Subo hasta la cima de Paa Peak (4.273 mts) con buenas vistas hacia el Himalaya.
Bajo de nuevo al collado y me junto con el resto del grupo, ahora continuamos por la senda.
La senda va en sube y baja recortando por la cadena montañosa.
Tras casi 11 kilómetros llegamos hasta Paa Kharka, donde encontramos este refugio (4.111 mts) que es una antigua borda de pastores y hoy va a tocar comer aquí, es el único día que no se puede preparar la ruta para comer en un pueblo, ya que no hay nada por el camino.
Desde Tange hemos llevado cada uno el picnic en la mochila para comer ahora.
Allí también tenemos una fuente.
Llegamos a este collado donde están los sherpas descansando, el sherpa del otro grupo esta recuperando pero va muy cansado.
Las vistas al Nilgiri (7.061 mts), que esta delante del Annapurna son espectaculares.
El contraste de colores entre montañas es precioso, los collados, los barrancos, et...
Las formas de las piedras de arenisca que tenemos bajo nuestros pies parecen de mentira.
Subimos hasta un pequeño collado para disfrutar de las vistas y cual es nuestra sorpresa cuando vemos una pareja de Quebrantahuesos apareándose, el guía cuando bajamos y se lo contamos no se lo creía, ya que es un animal en peligro de extinción, de por si es difícil de ver y encontrar una pareja es mas complicado.
Como casi todos los días el viento empieza a soplar en el valle, pero hoy con mucho frío y por primera vez toca ponerse guantes, gorro y plomífero.
Las montañas van cambiando de color y bajamos por estas montañas de arena muy clara.
Nos sobrevuelas varios buitres del Himalaya.
El camino comienza a bajar con mucha inclinación y con bastante caída, los de las bicis no lo habrán pasado bien en esta bajada tampoco.
Ya podemos ver el punto final de la etapa de hoy.
Llegamos a Chusang que se encuentra en la carretera principal del Valle, por este pueblo ya pasamos a la ida en la segunda etapa.
Llegamos al alojamiento y para cenar nos pedimos un pollo asado para los dos, al contrario que el resto de animales domésticos como las vacas y las cabras que son pequeñas, el pollo nos sorprende por s tamaño, es como un pavo. No podemos con el y tenemos que llamar al guía y al sherpa para que cenen con nosotros. La cara de felicidad de ellos no tiene precio.
Información sobre el Valle del Mustang (Nepal)
EL REINO PROHIBIDO DEL MUSTANG
Mustang es el último reino perdido sobre la faz de la tierra. Exclusividad, tradición y misterio son las tres palabras que mejor definen este maravilloso y recóndito lugar. A caballo entre Nepal y Tíbet, ha permanecido herméticamente aislado del resto del mundo durante siglos. Gracias a esto, destila encanto y espiritualidad en cada uno de sus rincones.
El Reino de Mustang ha pertenecido como vasallo a estos dos lugares simultáneamente durante un largo periodo de tiempo. Hoy en día forma parte de Nepal, aunque conserva gran influencia de la cultura y las tradiciones del Tíbet. Durante siglos sus fronteras han permanecido cerradas para los visitantes. Incluso hoy, tan sólo un millar de afortunados al año tienen la ocasión de visitarlo, pagando previamente una alta tasa.
De las profundas gargantas del río Kali Gandaki a la visión espectacular del Annapurna, uno de los ochomiles más bellos de nuestro planeta. La aridez del alto desierto o la forma de vida tranquila y ancestral de sus apenas 9.000 habitantes. Sus templos y monasterios o la necesidad de un permiso especial para visitar algunas zonas. Todo en el Mustang nepalí hace sentir al viajero que llega hasta allí como un espectador realmente privilegiado.
Upper Mustang es el lugar más extraordinario dónde realizar esta actividad, no sólo del país, sino probablemente del mundo.
Puesto que la apertura de la región al turismo ha comenzado hace muy poco tiempo, la zona aún no está explotada y la afluencia de visitantes es mucho menor que en el resto del país. Además, la ubicación de Mustang, entre altas montañas, crea un microclima, a salvo de los monzones habituales en otras zonas como Everest o Annapurna.
UN TREK LLENO DE TRADICIONES
Al recorrer los senderos que transcurren entre sus aldeas, podremos observar la aridez del terreno y la dureza de la vida cotidiana en tan extremas circunstancias. Los habitantes de esta región están poco acostumbrados aún a la presencia de occidentales en sus tierras. Sin embargo, comparten sus tradiciones casi con la misma curiosidad con la que el visitante observa su modo de vida.
Esta inaccesibilidad unida a la sensación que te invade, cuando recorres sus territorios, de que el tiempo se ha detenido son, sin duda alguna, el mayor encanto de este reino prohibido de Mustang.
Los paisajes que se despliegan ante nuestros ojos, en cada una de las jornadas, completan esta maravillosa y única experiencia. Así, a lo largo del recorrido nos encontraremos con una vista excepcional del majestuoso Annapurna, que se erige orgulloso con sus más de 8.000 metros de altura, o el Dhaulagiri con mayor elevación que este, incluso.
EL ESPECTACULAR PAISAJE DEL UPPER MUSTANG
No menos fastuoso es el desfiladero que discurre entre estos dos ochomiles, el Kali Gandaki, horadado por el río del mismo nombre. Es el cañón más profundo del mundo, llegando a los 5.500 metros de desnivel, desde el suelo de la grieta hasta la cumbre del Dhaulagiri a 8.167 metros, y como tal un fenómeno de la naturaleza digno de mención y de la atención del viajero.
Un microclima protege de las lluvias durante todo el año gran parte del territorio de Mustang. Esto hace que la vegetación sea escasa y permite el disfrute de una escena peculiar a lo largo del camino. Áridos parajes y caprichosas siluetas en las formaciones rocosas, con peñascos rojizos y anaranjados, que en ocasiones nos recuerdan a una imagen lunar, y que hacen este recorrido aún más curioso.
UNA FAUNA ESCONDIDA
Entre las áridas tierras de Mustang crecen el leopardo de nieve o las ovejas azules, dos insólitas especies propias de la zona. También podemos ver chacales, perdizes, marmotas, buitres del Himalaya, Quebrantahesos, Alimoches, Aguilas. etc... Eso si, son escurridizas. Casi tanto como el mítico y fantástico abominable hombre de las nieves, que según las leyendas se esconde en las montañas del Himalaya.
LOS MONASTERIOS DE MUSTANG
Diseminados por todo el territorio, existen numerosos monasterios. En ocasiones erigidos en rincones alejados de las rutas principales, ponen de manifiesto la religiosidad que se respira en cada rincón de este reino perdido.
Si a estas primitivas fábulas, transmitidas de generación en generación hasta nuestros días, le añadimos una sociedad que continúa hoy viviendo como lo hacía siglos atrás, fiel a sus ancestrales tradiciones y completamente aislada del mundo exterior, el resultado es un destino fascinante, intrigante y excepcional.
Un buen ejemplo de todo ello es el Monasterio de Lo Gekar. Es uno de los lugares más sagrados de Mustang y según los lugareños, fue construido por Padmasambhavael, fundador del budismo tibetano. También cuentan que en este templo se escondió, y aún se conserva, el corazón de un demonio que aterrorizó a la población durante años.
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