Toloño

domingo, 24 de noviembre de 2019

Salto del Nervion desde Delika

Hacia mucho tiempo que tenia ganas de realizar esta ruta y me decido a hacerla con Javi. En principio es una fácil ruta por sendero y con poco desnivel, pero al hacerlo cuando hay agua toca vadear el río. En diferentes blogs se puede leer que hay que vadear el río en tres ocasiones, aprovechamos las grandes lluvias de los últimos días para poder observar el salto de agua en su plenitud. Esta vez tenemos que vadear el río en doce ocasiones, hay que ir concienciado de que te vas a mojar al cruzar el río, es necesario ayudarse de bastones para guardar el equilibrio al cruzar y dejar calzado, calcetines y pantalones en el coche para cambiarse al volver.

Entre los contrafuertes de la Sierra Salvada, imponente muralla que sirve de frontera entre Euskadi y Burgos, el Nervión se desploma al vacío en uno de los saltos de agua más espectaculares del continente europeo.
Un impresionante mirador permite asomarse al vacío y contemplar los más de 200 metros de caída que hacen que el agua llegue abajo convertida en apenas una nube de partículas húmedas.
Esta vez no nos conformamos con mirar desde lo alto, sino que recorreremos el fondo del cañón hasta tocar con nuestras manos el agua recién caída. Es una sensación mágica y más si alzamos la mirada para sentirnos minúsculos al pie de gigantescas paredes de piedra que forman el circo de Delika, vigilado en todo momento por los buitres.


El bucólico pueblo de Delika es un lugar de esos donde el tiempo parece detenerse, solo el tren que pasa sobre un viaducto de piedra despierta los viejos caseríos de un letargo en el que la ganadería es el principal recurso. Estamos en tierras de buenos pastos y mejores quesos y pocas son las familias que no cuentan con su propio rebaño.
Salimos del centro del pueblo, pasamos por debajo del viaducto del tren, siguiendo la carretera.


Pasamos por el restaurante El Infierno 2.0, aquí también se puede dejar el coche, pero suele estar a tope.


Cogemos el sendero remontando el Nervión, sorprende ver este pequeño arroyo de aguas cristalinas, cuando su nombre siempre nos recuerda a una ancha ría junto al Guggenheim.


Pasamos junto a estaba bonita cascada y su poza.


Cruzamos el precioso puente de piedra, será la única vez que crucemos el río sin mojarnos. El camino normal continua paralelo al río y toca cruzar el río muy pronto.



En vez de cruzarlo y tener que mojarnos tan pronto, continuamos con la pista que sigue de frente, coge más altura y no toca cruzar el río hasta  mucho más adelante, a la vuelta bajaremos por la normal. Desde aquí podemos ver el cañón de Delika y al fondo la parte alta de la cascada.



Continuamos por la pista y bajamos hasta la altura del río para volver a unirnos al camino normal.


Tenemos que vadear el río, cantidad de veces, el camino se ve claramente.



Pasamos por bonitas cascadas que caen de las paredes del cañón.


Los colores marrones y amarillos de los hayedos son impresionantes, hay cantidad de tonalidades en el bosque.



El cañón se cierra cada ve más, atrás han quedado los pastos. Vadeamos continuamente el río, buscando la mejor zona para cruzar.




El sendero acaba frente a esta cascada,si queremos seguir más arriba, tendremos que trepar por grandes rocas, no hace falta hacerlo, ni es recomendable aventurarse.


Desde el punto donde acaba el sendero vemos perfectamente el Salto del Nervión con sus 222 metros de caída, es el salto más alto de la Península Ibérica.


Hemos llegado a uno de los rincones más inhóspitos de Euskal Herria, un lugar donde la señal GPS se pierde entre las altas paredes de piedra. Arriba en el mirador las personas parecen hormigas.




Llegamos los primeros del día y aprovechamos a realizar cantidad de fotos con todas las vistas para nosotros.




La visión del circo de piedra es impresionante y nos acompañara en el recuerdo mientras desandamos el camino hacia Delika.




Volvemos a bajar por el mismo camino, vadeando el río cantidad de veces. Nos encontramos con bastante gente que sube ahora.


A la vuelta cogemos el sendero más pegado al río, por el lado opuesto al que hemos subido.



Cruzamos un afluente que baja saltando desde los farallones rocosos, creando una hermosa cascada escalonada.




Poco después cogemos un sendero que sube hacia la izquierda y sale junto al puente para no tener que vadear el río en una zona que nos iba a llegar por las rodillas.




Llegamos al pueblo y tras cambiarnos de ropa, toca la cerveza de rigor en el único bar del pueblo.



Más información en mi track: SALTO DEL NERVION

Mapa de la ruta:


DISTANCIA: 9 KILÓMETROS.
DURACIÓN: 2 Horas 45 Minutos.
DESNIVEL: +250 MTS.
DIFICULTAD: FÁCIL.