Toloño

sábado, 18 de julio de 2020

Vignemale (3.298 mts), Clot de la Hount (3.289 mts), Cerbillona (3.247 mts) y Pico Central (3.235 mts) desde el Barranco de Ossau



Después de unos días por el Pirineo Oscense, Valle y yo cruzamos la cordillera para juntarnos en Gavarnie con Aitor, Ugaitz, Gaizka y Fernan.
Todos los años quedamos en verano para ascender alguna conocida cima de Pirineos, este año hemos elegido el Vignemale.
Para ello subimos desde Gavarnie en coche hasta el Barrage d'Ossoue, primero en carretera asfaltada y luego en una pista de grava que cada vez esta en peor estado, aunque cuando llegas arriba ves todo tipo de coches. 
Allí encontramos el Embalse de Ossoue (1.830 m). A su orilla hay un refugio abierto y praderas. Continuaremos atravesando el llano que se extiende más allá del lago. Al fondo se cruza el río por un puente.



Cruzamos el rio (Ruisseau des Oulettes) y seguimos por la senda que supera el barranco donde encontramos una preciosa cascada. Pasado el desfiladero vuelve a empinarse el sendero para rebasar una pared tallada. 






Luego el sendero desciende, cruzando un nevero perenne que cubre varios arroyos



Al fondo vemos el zig zag que nos espera en la zona verde.



Tras dar un amplio rodeo entre praderas alcanzamos las grutas de Bellevue (2.490 m). 

Henry Russel, cansado de explorar las grandes cimas pirenaicas (su primera al Vignemale sería en 1861), hizo construir entre 1881 y 1893 siete cuevas en el macizo de Vignemale, la montaña de sus sueños, ilusiones y obsesiones. Su objetivo: pasar su jubilación al abrigo de las montañas.

Las 3 primeras cuevas se encuentran poco antes de enfilar los últimos metros hacia el refugio de Baysellance, a 2.400 m, en la cabecera del glaciar de Ossau. Cuando el glaciar cubría las cuevas superiores, 800 m más arriba, Russell, ni corto ni perezoso, mandó construir éstas en 1888. Pasarían a conocerse como las cuevas de Bellevue. Allí montaba buenas juergas con sus amigos más íntimos, entre ellos Bazillac, los Passet,…



Llegamos a la lengua del glaciar, la nieve nos facilitará mucho la progresión. Inicialmente la pendiente es fuerte, aunque luego, a medida que avanzamos, va suavizando. Nos dirigiremos hacia la derecha, en busca de la prominencia más significativa, que es el Vignemale. La piramide que tenemos en frente es el Montferrat (3.217 mts).



Nos calzamos los crampones, sacamos el piolet y el casco y guardamos uno de los bastones. Es muy importante en la nieve las gafas de sol y darse bien de crema solar, el reflejo del sol en la nieve te puede quemar la piel y la retina si no se han bien las cosas.




Ya podemos ver el Vignemale a la derecha, toca subir por la nieve hasta la base.





En la base nos quitamos los crampones y podemos dejar la mochila, esta es la parte más peligrosa de la ruta. Más que por el terreno de la montaña por la gente que sube por esta trepada, ya que si hay mucha gente y con poco cuidado caen bastantes piedras. El casco obligatorio para esta zona.



No hay un camino definido, hay que subir trepando por donde mejor lo veas.



Llegamos al Vignemale o Pique Longe (3.298 mts), es la más elevada de las cumbres situadas en el Pirineo Frances, posee el glaciar mejor desarrollado, la muralla más grandiosa, la escalada en hielo más célebre... Para mi desde Oulettes de Gaube hacia el Vignemale una de las mejores vistas del Pirineo.


Podemos ver desde aquí el refugio de Wallon.


El refugio de Baysellance lo tenemos debajo.


Se ve muy bien el Perdido y el Taillon desde aquí.


Podemos ver abajo el Lac de Gaube.




La primera ascensión de la que se tiene constancia es la de Henry Cazaux, de Luz y Bernard Guillembert de Gedre en 1837. Cruzaron el glaciar de Ossue hasta la cima y bajaron al valle de Ara. En 1838, una expedición capitaneda por Henry Cazaux, consigue elevarse desde el valle de Ara por las canales de Cerbillona hasta la cima. Lo interesante de esta aventura, es que formaron parte de ella dos damas inglesas: Lady Lister, en realidad Miss Anne Lister ( soltera y con 47 años de edad ), y una amiga. La misma ruta fue la elegida para que días depués Cazaux, subiese al príncipe de Moscú a la cima, acompañado por su hermano y un sirviente. La vía ha pasado a denominarse como "Principe de Moscú".



Tras disfrutar de las vistas en la cima, decidimos bajar. Hay que tener mucho cuidado en la bajada y evitar tirar piedras a la gente que tenemos por debajo. 
Yo libro una roca bastante grande que me tira desde arriba un personaje que sube como si estuviera el solo, la gente le echa la bronca y sigue subiendo como si nada. 
La verdad que me da tiempo a ver la dirección de la roca grande y correr hacia el lado contrario y después esconder el cuerpo en la montaña y que la chinas pequeñas den en el casco.
Es mejor opción subir a esta montaña entre semana si es posible y evitar así la multitud de gente.


Bajamos a la base, cogemos la mochila y nos calzamos los crampones Valle, Gaizka y yo para subir hasta el collado de Cerbillona que se ve al fondo y continuar a por algún tresmil más. El resto del grupo comienza el descenso poco a poco.

Antes de llegar al collado, pasaremos bajo las Cuevas Russell. En agosto de 1882, se completó la primera, que se llamaría Villa de Russell. Pasó allí tres días e invitó a sus amigotes para la inauguración; entre ellos Henri Passet. En 1885 mandó construir la segunda Cueva de los Guías, y luego en 1886, la tercera: la Cueva de las Damas. Cuando fueron excavadas, quedaban a la altura del glaciar, 120 años más tarde el glaciar ha bajado tanto que subir a las cuevas requiere de una pequeña escalada, lo que demuestra el importante retroceso del glaciar.

Quizá durante alguna de aquellas “bacanales” en las cuevas inferiores, fue donde Henry pensó que necesitaba una cueva aun más arriba, prácticamente en la cima del Vignemale. Así pues Le Paradis sería construida a golpe de explosivo entre los años 1892 y 1893, 18 metros por debajo de la cima. Habían pasado 30 años desde su primer ascenso y quería celebrar sus “bodas de plata”.





Con una extensión de 70 Ha., el glaciar d'Ossoue es la segunda masa de hielo perenne en movimiento de la cordillera, después del Glaciar de Aneto ( 132 Ha.). Sin embargo, si que es el más espectacular, pues la masa de hielo cubre todo el fondo de la cubeta montañosa de Vignemale, a diferencia del anterior que se halla suspendido sobre una ladera. Por ello, el de Ossoue muestra el típico prototipo del glaciar alpino con una lengua de hielo en su parte terminal.

El retroceso experimentado por los glaciares pirenaicos en las últimas décadas ha menguado considerablemente la extensión de los mismos, por lo que sólo han quedado los circunscritos a los macizos más elavados de la cordillera: Vignemale, Monte Perdido y Aneto-Maladeta.


Podemos ver desde aquí el Vignemale y Pointe Chausenque a la izquierda, Cerbillona, Pico Central y Montferrat a la derecha. Nos quitamos los crampones y dejamos la mochila en el collado para girar a la derecha hacia la segunda cima.



Esta segunda cima es más sencilla, una subida por una cómoda arista. Llegamos a Clot de la Hount (3.289 mts). Es la segunda cima más elevada del macizo del Vignemale, que tiene la desgracia de medir 9 metros menos que el Grand Vignemale o Pique Longue ( 3.298 m ) por lo que es menos conocida. A pesar de ello se contempla como cima bien individualizada sobre la fragmentada cresta que le une al pico principal. 



Esta es la cresta bastante expuesta que une Vignemale de Clot de la Hount, también se puede hacer por arriba sin tener que bajar al collado.


Descenderemos de nuevo hacia el Collado de Cerbillona.



Subimos desde el collado hasta la siguiente cima, esta sin ningún tipo de dificultad.


Llegamos a la tercera cima de hoy, el Cerbillona (3.247 mts)



Ahora nos toca bajar al Col de Lady Lyster y enfrente tenemos la siguiente cima.



A la derecha tenemos el Valle de Bujaruelo y el Valle de Otal.



Llegamos a la cuarta y última cima del día el Pico Central (3.235 mts).


Desde aquí podemo ver como continua el cordal de tres miles con Montferrat (3.217 mts) delante, Tapou (3.151 mts) y Milieu (3.131 mts) detrás.



Desde aquí ya bajamos directamente a buscar el glaciar. Nos calzamos los crampones y por el glaciar bajaremos a buscar el camino bien pisado por el que subimos al Vignemale, para luego descender siguiendo en todo momento el camino de subida.




Salimos del glaciar y continuamos bajando por el mismo camino de subida.


Volvemos a pasar por las cuevas inferiores de Russell donde también hay un reloj solar.






Nos juntamos con la otra parte del grupo y bajamos todos juntos.



Llegamos a este punto donde el nevero se ha roto hace pocas horas, a la subida lo hemos cruzado por encima, menos mal que no ha pillado a nadie.



Foto collage con la diferencia del mismo nevero a la subida y a la bajada.



Llegamos al Embalse de Ossoue.


Mapa de la ruta:


Gráfica de la ruta:


DISTANCIA: 20 KILÓMETROS
DURACIÓN: 9 HORAS
DESNIVEL: +1.700 MTS.
DIFICULTAD: MODERADO.

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