ACCESO: SYANBOCHE
ZONA: VALLE DEL MUSTANG
DISTANCIA: 17,5 KILÓMETROS
DURACIÓN: 8 HORAS
DESNIVEL: +1.050 MTS -1.050 MTS
PUNTO MÁS BAJO: 3.519 MTS
PUNTO MÁS ALTO: 4.038 MTS
MAPA Y TRACK DE LA RUTA (pinchar en Wikiloc para descargar el track):
GRÁFICA DE LA RUTA:
RELIVE DE LA RUTA:
MÁS INFORMACIÓN DE LA RUTA:
Continuamos en el Valle del Mustang y otro día más nos despertamos en Syanboche (3.773 mts) con un día despejado y con el cielo azul.
Subimos hasta 3.830 mts y continuamos disfrutando de las espectaculares vistas a Samar Peak.
Nos cruzamos con gente local que va a trabajar a caballo a otros pueblos.
Nuestro sherpa Sucar nos lleva los petates con la ropa para los 10 días, esta gente si que es dura.
Llegamos al pueblo de Ghilin (3.539 mts) donde entramos para visitarlo.
Subimos hasta el monasterio budista Ghiling Gompa.
Nos adentramos en el interior del templo, buscando a los budas para que nos abran las puertas de sus zonas más sagradas.
Hablamos con los budas y nos enseñan el interior del templo donde es obligatorio entrar descalzo y no se puede hacer fotos.
Salimos del templo siguiendo un sendero y mirando hacia atrás podemos ver el templo con las montañasde mas de 7.000 en la parte trasera.
Nos encontramos en el sendero varios excrementos de Leopardo de las Nieves.
Allí podemos ver como sube la carretera principal en zig zag.
Llegamos a un collado a 4.038 mts y nos tomamos un descanso para comer algo rápido.
Nos sorprende ver una cascada congelada en una zona donde no queda nieve.
Tenemos varios sube y baja por el camino.
Pasamos por un collado a 3.792 mts, vamos siguiendo los hitos y observando las curiosas formaciones rocosas.
Llegamos al pueblo de Ghami (3.598 mts) y recorremos su interior.
Paramos a comer en un alojamiento, ya que es la hora de comer.
Encontramos a la gente fregando las cazuelas en la calle.
Salimos del pueblo y cogemos un sendero paralelo al río buscando un puente.
El camino es espectacular, con las hojas caídas en el suelo.
Tras el monzón el puente ya no existe y nos cuesta encontrar un paso, encontramos una especie de puente construido con dos troncos y sacos.
Encontramos varios Geckos por el camino y cantidad de estupas budistas.
Subimos hasta un collado a 3.750 mts.
Nos acercamos al final de la etapa y nos acercamos a estas espectaculares montañas rojas.
El lugar es espectacular con rocas de formas diferentes y diferentes colores.
Llegamos al pueblo de Dhakmar y buscamos nuestro alojamiento.
Nos dan alojamiento en la casa del maestro del pueblo que es un chaval jovencísimo, que sabe idiomas y cocina de lujo.
Aprovechamos a dar una vuelta por el pequeño pueblo, que sorprende porque tiene un gran campo de futbol.
Disfrutamos del atardecer, ha hecho un día espectacular de calor, pero en cuanto se va el sol las temperaturas bajan de los 15 hasta los 3 grados.
Nos dicen que comamos con ellos en la cocina de la casa donde tienen una cocina de leña que sirve también para calentarnos, rodeando el fuego hablamos un buen rato, utilizan los excrementos de Yak secos para quemar en el fuego de la cocina.
Información sobre el Valle del Mustang (Nepal)
EL REINO PROHIBIDO DEL MUSTANG
Mustang es el último reino perdido sobre la faz de la tierra. Exclusividad, tradición y misterio son las tres palabras que mejor definen este maravilloso y recóndito lugar. A caballo entre Nepal y Tíbet, ha permanecido herméticamente aislado del resto del mundo durante siglos. Gracias a esto, destila encanto y espiritualidad en cada uno de sus rincones.
El Reino de Mustang ha pertenecido como vasallo a estos dos lugares simultáneamente durante un largo periodo de tiempo. Hoy en día forma parte de Nepal, aunque conserva gran influencia de la cultura y las tradiciones del Tíbet. Durante siglos sus fronteras han permanecido cerradas para los visitantes. Incluso hoy, tan sólo un millar de afortunados al año tienen la ocasión de visitarlo, pagando previamente una alta tasa.
De las profundas gargantas del río Kali Gandaki a la visión espectacular del Annapurna, uno de los ochomiles más bellos de nuestro planeta. La aridez del alto desierto o la forma de vida tranquila y ancestral de sus apenas 9.000 habitantes. Sus templos y monasterios o la necesidad de un permiso especial para visitar algunas zonas. Todo en el Mustang nepalí hace sentir al viajero que llega hasta allí como un espectador realmente privilegiado.
Upper Mustang es el lugar más extraordinario dónde realizar esta actividad, no sólo del país, sino probablemente del mundo.
Puesto que la apertura de la región al turismo ha comenzado hace muy poco tiempo, la zona aún no está explotada y la afluencia de visitantes es mucho menor que en el resto del país. Además, la ubicación de Mustang, entre altas montañas, crea un microclima, a salvo de los monzones habituales en otras zonas como Everest o Annapurna.
UN TREK LLENO DE TRADICIONES
Al recorrer los senderos que transcurren entre sus aldeas, podremos observar la aridez del terreno y la dureza de la vida cotidiana en tan extremas circunstancias. Los habitantes de esta región están poco acostumbrados aún a la presencia de occidentales en sus tierras. Sin embargo, comparten sus tradiciones casi con la misma curiosidad con la que el visitante observa su modo de vida.
Esta inaccesibilidad unida a la sensación que te invade, cuando recorres sus territorios, de que el tiempo se ha detenido son, sin duda alguna, el mayor encanto de este reino prohibido de Mustang.
Los paisajes que se despliegan ante nuestros ojos, en cada una de las jornadas, completan esta maravillosa y única experiencia. Así, a lo largo del recorrido nos encontraremos con una vista excepcional del majestuoso Annapurna, que se erige orgulloso con sus más de 8.000 metros de altura, o el Dhaulagiri con mayor elevación que este, incluso.
EL ESPECTACULAR PAISAJE DEL UPPER MUSTANG
No menos fastuoso es el desfiladero que discurre entre estos dos ochomiles, el Kali Gandaki, horadado por el río del mismo nombre. Es el cañón más profundo del mundo, llegando a los 5.500 metros de desnivel, desde el suelo de la grieta hasta la cumbre del Dhaulagiri a 8.167 metros, y como tal un fenómeno de la naturaleza digno de mención y de la atención del viajero.
Un microclima protege de las lluvias durante todo el año gran parte del territorio de Mustang. Esto hace que la vegetación sea escasa y permite el disfrute de una escena peculiar a lo largo del camino. Áridos parajes y caprichosas siluetas en las formaciones rocosas, con peñascos rojizos y anaranjados, que en ocasiones nos recuerdan a una imagen lunar, y que hacen este recorrido aún más curioso.
UNA FAUNA ESCONDIDA
Entre las áridas tierras de Mustang crecen el leopardo de nieve o las ovejas azules, dos insólitas especies propias de la zona. También podemos ver chacales, perdizes, marmotas, buitres del Himalaya, Quebrantahesos, Alimoches, Aguilas. etc... Eso si, son escurridizas. Casi tanto como el mítico y fantástico abominable hombre de las nieves, que según las leyendas se esconde en las montañas del Himalaya.
LOS MONASTERIOS DE MUSTANG
Diseminados por todo el territorio, existen numerosos monasterios. En ocasiones erigidos en rincones alejados de las rutas principales, ponen de manifiesto la religiosidad que se respira en cada rincón de este reino perdido.
Si a estas primitivas fábulas, transmitidas de generación en generación hasta nuestros días, le añadimos una sociedad que continúa hoy viviendo como lo hacía siglos atrás, fiel a sus ancestrales tradiciones y completamente aislada del mundo exterior, el resultado es un destino fascinante, intrigante y excepcional.
Un buen ejemplo de todo ello es el Monasterio de Lo Gekar. Es uno de los lugares más sagrados de Mustang y según los lugareños, fue construido por Padmasambhavael, fundador del budismo tibetano. También cuentan que en este templo se escondió, y aún se conserva, el corazón de un demonio que aterrorizó a la población durante años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario